La Diócesis de Goya presente en el Encuentro Regional de la Pastoral Penitenciaria 
Responsables de la Pastoral Penitenciaria de la Región NEA, participaron del encuentro regional que se desarrolló con el lema “Parroquia-cárcel: lugar de encuentro”. La actividad se realizó durante el fin de semana, en la casa “Ñu Porá” de los sacerdotes salesianos de Resistencia, y contó con la participación 80 de referentes y capellanes de las diversas diócesis.
Estuvieron presentes, los integrantes de la comisión de Pastoral Penitenciaria de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA): monseñor Juan Carlos Ares, (presidente) obispo auxiliar de Buenos Aires; y monseñor Adolfo Canecín, obispo de Goya. Asimismo el presbítero Rubén Infantino, secretario ejecutivo de la comisión episcopal de Pastoral Penitenciaria y Patricia Alonso, coordinadora nacional.
El encuentro se inició con la exposición de monseñor Adolfo Canecin, quien ayudo a reflexionar sobre la situación de la pastoral penitenciaria en cada diócesis y continuo monseñor Juan Carlos Ares, quien ilumino a los presentes sobre el tema “Parroquia-Carcel: un lugar de encuentro”.
Otro momento fue la predicación del presbítero Ernesto de Jesús Maza, quien motivo el encuentro invitando a los delegados diocesanos a proyectar acciones concretas y llevar adelante en sus respectivas diócesis.
Para finalizar se eligió una terna de sacerdotes para para que sea designado por los obispos de la región NEA, como Delegado Regional, y se propuso a los presbíteros Ernesto de Jesus Maza (Resistencia), Diego Alberto Villalba (Goya) y Hugo Esnarriaga (Puerto Iguazu). El nuevo delegado iniciaría su servicio en la cuaresma de 2019.
Una misa presidida por el arzobispo de Resistencia monseñor Alfredo Ramon Dus y concelebrada por los obispos asistentes, marco la clausura del encuentro regional.
MONSEÑOR CANECIN
El obispo de Goya, monseñor Adolfo Canecin destaco el lema que identifico la reunión “Parroquia–cárcel, lugar de encuentro” y animo a visitar siempre a los presos, porque “nos encontramos con Jesús detrás de una reja” al tiempo que llamo a “tener cercanías con las familias de las personas que están privadas de la libertad” por eso “convoco a aquellos que sienten y tienen el carisma, vayan a visitar a los presos, el gran motivo por lo cual visitamos a los presos es porque queremos encontrarnos con Jesús, el mismo nos dijo ´Estuve en la cárcel… y viniste a verme…( Mateo 25), por eso, visitemos a los presos, sea cual fuere el delito que haya cometido, hasta el más tremendo –aclaro-, en los presos podemos encontrar a Jesucristo”.
“La cárcel es un lugar teológico donde encontraremos a Jesús, asi como lo encontramos en la Biblia o en el Sagrario, en la comunidad o en los sacramentos” dijo
“Mis hermanos, abrazar a Cristo detrás de una reja es encontrarse con el gesto del Padre Misericordioso y es descubrir el amor entre hermanos” expreso el obispo.
Invito también a los abogados a sumarse a la Pastoral Penitenciaria, porque “un profesional del derecho puede pertenecer a la Pastoral Penitenciaria y, no es necesario de que vaya a visitar al preso detrás de la reja, pero puede ayudar haciendo un seguimiento de las causas judiciales,” dijo
Más adelante el prelado señalo que la población carcelaria es juvenil, sobre todo en la penitenciaria de Goya, “allí reconocemos los rostros sufrientes que nos duelen: en los que están detenidos en cárceles” porque “los presos de hoy son jóvenes, hay muy pocos adultos” y en esa realidad: “esta situación nos interpela y cuestiona” por eso, reiteró el llamado a “acompañar” a las personas privadas de libertad.
Los obispos en el Documento de Aparecida nos dicen: “Una realidad que golpea a todos los sectores de la población, pero principalmente al más pobre, es la violencia, producto de las injusticias y otros males”.
“Vamos a la cárcel y encontramos a personas que han delinquido, pero a veces también nosotros sacamos lo peor de nosotros, aunque no sea tal vez un delito, pero si es pecado. Por eso, es bueno también descubrir que tenemos cosas buenas, bellas y santas para sacar de nosotros lo mejor” reflexiono.
La Pastoral Penitenciaria es una pastoral de la Iglesia a favor de los que, directa o indirectamente, se encuentran afectados por la realidad de la cárcel, por eso sale al encuentro de las personas privadas de la libertad y de sus familiares, lo que denominamos el mundo de la carcelación.-
Martes, 16 de octubre de 2018
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