Facebook: Miño negó arreglos económicos por su abstención  El senador Roberto Miño comunicó a sus pares que no los acompañaría. La semana anterior su ausencia determinó que el resto de la bancada no dé quórum. Las señales de los últimos días eran las de que el justicialismo cerraría filas abroquelándose para potenciar sus posibilidades de cara al 2017. Finalmente ello no ocurrió, aunque hay esperanzas de que los vientos cambien. Un largo camino queda por delante, donde asoman coincidencias y diferencias por doquier.
Quedó en claro que el Gobierno, o al menos Colombi, está dispuesto a jugar fuerte. No es una novedad. Hace al estilo que le ha dado resultados a Ricardo para llegar donde llegó y mantenerse, lo cual no es fácil. Tres veces gobernador es quien, en la historia de la Provincia, más años ejerció el cargo.
Ahora, no es un secreto, apunta a crear las condiciones para un nuevo período, de dos, cuatro o seis años y consciente de que -para ello- necesita consenso para lograr los dos tercios apuesta a que un sector del justicialismo lo habilite otorgándole los votos necesarios para sancionar la ley declarativa de la reforma.
La pulseada no fue sino otro capítulo en la compleja conformación del escenario electoral de cara al 2017. Lejos estuvo de circunscribirse a la aprobación o rechazo del pliego de un juez. Había otras cosas en juego y un trasfondo. Colombi apuntó a doblegar al PJ y no lo logró. Sí consiguió el concurso del Intendente de la Capital mediante el cual pudo atar las manos de un senador afín que -con su abstención- posibilitó la derrota de la bancada opositora.
Para algunos, fueron las urgencias financieras de la Capital; para otros, un incipiente acuerdo político, lo cierto es que -a la hora de la verdad- nuevamente al justicialismo le faltó cinco para el peso. Una vez más, las contradicciones internas pudieron más y no hubo una estrategia de conjunto que priorice las posibilidades electorales del peronismo. No es tampoco una novedad. Esta, y no otra, es la causa por la cual el justicialismo desde hace 43 años no se impone por el voto popular en Corrientes.
La novedad de la posición del senador Miño conmovió a sus compañeros de bloque y del interbloque. Horas atrás, todos se habían juramentado mantener una posición común a la hora de fijar posiciones. Las cosas cambiaron. A instancias del Intendente de la Capital, el senador Miño mutó su posición originando algo más que molestias en sus compañeros que, antes que nada, reclamaron por las formas.
Y por las formas, precisamente, el propio bloque peronista fulminó toda posibilidad de un trámite exprés, sobre tablas, al acuerdo Nación-Provincia respecto al 15 por ciento, desautorizando implícitamente preacuerdos de la noche anterior que habrían involucrado a Rubén Pruyas y Sergio Flinta. El bloque se impuso -sobre la hora- de la pretensión de un rápido tratamiento y dejó en claro que no habilitaría los dos tercios. Aun con el concurso de Miño y Pruyas, faltaba un voto más y no había voluntad -en el bloque opositor- de mayores concesiones tanto más cuanto se venía de la situación traumática que generó la enigmática abstención de Miño y el hecho de no haber sido informados los restantes senadores de las conversaciones o preacuerdos de las últimas horas.
Una de las dos batallas decisivas, de cara al 2017, habría entonces sido ganada por Colombi, algo de hecho previsible si se tiene en cuenta la capacidad de trabajo y la férrea voluntad política del número uno de la alianza gobernante, aunque -la lectura que quedó- no fue de un triunfo en toda la línea. Algunos incluso hablaban de una victoria a lo Pirro.
La forma como se llegó a él genera dudas e interrogantes. ¿Hubo presión? ¿Hubo acuerdos tras bambalinas? El tiempo dirá, pero lo que está claro es que el justicialismo, como expresión orgánica y de bloque, transitó por otro andarivel, acaso buscando su cauce.
Lo del jueves, vinculado a la abstención de un senador que posibilitó la derrota del justicialismo, fue una señal fuerte hacia adentro y hacia afuera, aunque no parece un hecho menor el esfuerzo que se realiza -en la orgánica partidaria- para refirmar la vocación de poder de cara al 2017, más allá de la actitud discordante de alguna voluntad que hace recordar aquello de que golondrina suelta no hace verano. Después de la sesión, había convicción en la bancada justicialista de que había posibilidades de recomponer las filas. De hecho, y se advirtió en la sesión, en ningún momento se perdió el respeto ni el diálogo, aunque sí fue evidente, como nunca antes en el Senado, el nivel de rispidez entre el oficialismo y la oposición.
Los argumentos de Roberto Miño
La abstención es una figura cuanto menos curiosa para estos casos, donde lo que corresponde es que se apruebe o se rechace. Al pedir permiso para la abstención, debió invocarse un fundamento para ello.
Respecto al supuesto conocimiento del resto del bloque, distintas fuentes del mismo y la propia Nora Nazar aseguraron que el compromiso de Miño era el de acompañar en el voto a los demás.
Sin embargo, al ser consultado por la prensa luego de la sesión, el senador Roberto Miño insistió en que "era una decisión tomada hace días ya. Era una discusión que teníamos en el bloque. Acá no hay ningún tipo de ruptura de bloque. Es una decisión personal".
-¿Personal o consensuada con el Intendente capitalino? -le preguntó el periodista.
-Consensuada con un montón de gente. En realidad yo no tomo decisiones por mi cuenta. Soy de realizar consultas, sobre todo con la gente que me ha acompañado a lo largo de mi carrera política. Fui muy sincero en mi bloque, hace días que lo vengo manifestando. Por supuesto que se puede interpretar para afuera como traiciones, cosa que no existe. Seguimos siendo parte del bloque.
Y agregó más adelante: "Seguramente cuando vayan apareciendo los diferentes jueces a esta Cámara, los senadores vamos a tener criterios dispares. Y es real, y la verdad que lo importante es que lo podemos discutir y tomar posiciones. Entran tres pliegos nuevos, y también ya hay opiniones dispares. Vemos si lo podemos consensuar, vemos si los compañeros me convencen o si yo los puedo convencer. Pero no hay división de bloque, sino diferentes criterios".
En las últimas horas en su cuenta personal de Facebook escribió: "Dedicarse a la vida política conlleva estar siempre sujeto y obligado lógicamente a estar expuesto a la opinión pública ,son las reglas de juego , a la opinión de propios y extraños y sometido a la decisión popular que es la que determina con su voto ,a sus representantes". "A los 18 años militaba en la Juventud Universitaria Peronista, en el 200, 2005 y 2009 fui candidato a intendente de mi ciudad Santa Lucía por mi partido Justicialista, fui Presidente por dos periodos de Consejo Departamental del PJ de Lavalle, Congresal Provincial, Consejero Departamental, y actualmente Congresal y Consejero Provincial y desde el 2013 Senador Provincial, a todos estos cargos accedí casi sin excepción, siempre por voluntad popular".
"Y soy más que nada un militante de toda la vida de este mi partido, el partido de Peron, de Evita, de Néstor y de Cristina. Tantos años de recorrido, de permanencia y de pertenencia solo es posible desde la ética, las convicciones y desde la lealtades, a mís banderas irrenunciables". "En estos días escuchar o leer aberraciones y montajes mediáticos sobre conductas mias en la Cámara de Senadores referidas a la abstención en la ultima sesión, es desconocer mi manera de manejarme en mi vida pública, que no me extraña de los medios pertenecientes o afines al gobierno provincial, sino a medios pertenecientes a pseudo operadores desde las sombras, incapaces de exponerse a una elección o a los designios de la voluntad popular, que se rasgan las vestiduras disfrazados de peronistas, que acostumbrados a los contubernios y a nefastos arreglos, pretenden involucrarnos a todos en la misma bolsa de actitudes cuasimafiosas".
"Claramente expuse a mi bloque PJ/ FPV en el Senado, al presidente del PJ de la Provincia, al Presidente del Consejo de mi Departamento, al intendente de mi ciudad, y a varios dirigentes, diputados, intendentes y compañeros de toda la provincia, los motivos de mi abstención (lamento que en algunos casos lo pude explicar antes y otros después), que bajo ningún punto de vista, contenían motivos personales, ni arreglos económicos, ni barbaridades por el estilo". "Soy y seré como lo fui siempre opositor al partido gobernante en esta provincia y a las políticas neoliberales del gobierno nacional. Por tanto más allá de aceptar las reglas que impone la opinión pública, quería escribir esto para dejar en claro mi posición para aquellos con los que no me pude comunicar personalmente y agradecer profundamente y de corazón a los cientos de compañeros y amigos que me manifestaron su afecto sin preguntar los motivos, por qué una vida de dedicación y de lealtad no necesita de explicaciones. Gracias".Domingo, 29 de mayo de 2016
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