El asesinato a quemarropa de un joven, con pista narco 
A Miguel Ángel Zalazar lo mataron el jueves, en un lavadero de Itatí. Hay un sospechoso, llamado Bebecho, que es buscado. Hallaron escondido un automóvil y se cree que es el vehículo de donde dispararon. En plena investigación, una camioneta fue quemada y dieron con otro coche cargado de droga.
Itatí sigue conmovida por el asesinato de Miguel Ángel Zalazar, un joven de 23 años a quien le dispararon el jueves, cerca de las 19, desde un automóvil, cuando él estaba en un lavadero, en la avenida 25 de Mayo, en el acceso al barrio 9 de Julio.
La policía descartó el robo como móvil del crimen y las sospechas se centran en el ajuste de cuentas. Se habla de enfrentamiento de bandas narcos. En principio, hay un sospechoso, Eduardo Bebecho Zacarías Brítez, que hasta el momento continúa prófugo.
El ministro de Seguridad, Horacio Ortega, y el jefe de la Policía, Eduardo Acosta, estuvieron el viernes en Itatí trabajando con el personal de la comisaría local, la División Homicidios, la Dirección de Investigación Criminal y de la Unidad Regional I.
Acosta no descartó que el crimen de Zalazar haya sido un ajuste de cuentas entre bandas narco. “Es una de las hipótesis. Lo que está descartado es el intento de robo”, precisó el comisario general en Radio Dos.
El jefe policial aclaró que el auto secuestrado (un Chevrolet Astra) estaba en el lavadero donde ocurrieron los hechos y no es el utilizado por los atacantes. También se refirió al incendio intencional de una camioneta.
“A las 3 de la mañana [del viernes] se incendió una camioneta estaban preparando para hacer un trabajo relacionado con la droga”, comentó. El vehículo no tenía asientos.
Esa madrugada, vecinos alertaron a la policía del hallazgo de una camioneta incendiándose. El Departamento de Relaciones Institucionales de la Policía confirmó que el hallazgo de la camioneta ocurrió a las 3.30 del viernes, en pleno barrio Virgen del Rosario. Allí, acudió una dotación de Bomberos Voluntarios, que logró controlar las llamas. Ninguna persona se presentó como propietaria del vehículo siniestrado.
Cuando se buscaba al sospechoso, la policía halló un automóvil cargado con 400 kilos de marihuana en una vivienda. La droga estaba lista para ser trasladada en un vehículo que es solicitado desde la provincia de Entre Ríos. Estaba en una vivienda del centro de la localidad, que sería el domicilio del supuesto asesino.
Lo que se sabe hasta el momento es que Zalazar estaba trabajando el jueves en el lavadero, cuando desde un automóvil de color negro le dispararon. A pesar de haber sido socorrido inmediatamente, el joven –oriundo de San José, Misiones– falleció camino al hospital.
La policía encontró ayer el automóvil VW Fox (FID 448), color negro, que habría sido utilizado en el asesinato. Según publicó Radio Dos, el vehículo estaba escondido en el interior de un espeso matorral ubicado en los fondos de una casa de la zona conocida como El Basural, en Itatí. Al parecer, había manchas de sangre en las puertas y ventanillas.
El VW sería propiedad de Bebecho Zacarías Brítez. Según informó hoy el diario El Litoral, no descartan citar como testigo a su pareja, quien sería hermana de un concejal de Itatí.
Indignación
“A Miguel Ángel lo asesinaron a quemarropa, en un pueblo angaú tranquilo. No pienso ser cómplice en silencio de esta barbarie. Anoche [el jueves] celebraba con mis alumnos de 3 B de la Normal. Hay valores, hay jóvenes sanos, hay compromiso, pero hoy Miguel Ángel necesita ¡justicia!, que no es venganza”, escribió María Griselda Aquino, docente, en el blog Noticias Itateñas.
“Itatí, para parar este flagelo, no necesita más fuerzas de seguridad, ni gendarmes en las calles; Itatí necesita recuperar la familia y que ésta acompañe a la educación. Necesita más trabajo”, opinó ante el asesinato de Zalazar. (La República)Domingo, 10 de julio de 2016
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